Un adulto mayor y su nieto de 10 años perdieron la vida luego de que el taxi en el que viajaban fuera embestido por el tren en la localidad de Villa Gregorio García de Gómez Palacio.
Los hechos ocurrieron minutos después de las 16:00 horas. este sábado a la entrada de la referida localidad.
Alejandro Peralta Escobedo, fue el occiso identificado de aproximadamente 61 años de edad, quien tenía su domicilio en el ejido Santa Cruz Luján de esta ciudad.
También falleció Carlos, de 10 años, vecino de Gregorio García.
Ambos viajaban en un taxi Fiat amarillo con número económico 12 y placas del estado de Coahuila.
La unidad estaba al mando del señor Alejandro, quien intentó cruzar las vías y fue embestido por el tren, que continuaba su camino hacia la ciudad de Monterrey, sin brindar mayor información sobre la máquina.
La unidad se proyectó varios metros e impactó contra algunos postes y las bases de las plumas del crucero.
Testigos de los hechos solicitaron de inmediato la presencia de las corporaciones de salvamento y seguridad de la ciudad a través de múltiples reportes al Sistema Estatal de Emergencias 911.
Paramédicos de la Cruz Roja arribaron al lugar para revisar a los ocupantes del vehículo y confirmaron que ya no presentaban signos vitales.
Elementos de la Dirección de Protección y Seguridad Ciudadana y de la Policía Estatal acordonaron la zona hasta la llegada de los servicios periciales.
El personal de la Guardia Nacional, División de Carreteras, fue el encargado de elaborar los primeros informes periciales sobre el accidente.
El Agente de Investigaciones del Ministerio Público, adscrito al área de homicidios, tuvo conocimiento de ambas muertes.
Los cuerpos de los occisos fueron enviados a las instalaciones del servicio médico forense ubicado en Ciudad Lerdo, para que se realice la necropsia de Ley.
La Subprocuraduría General de Justicia del Estado de Durango, Región Laguna, abrió expediente al respecto y estará a cargo de la investigación complementaria del accidente.
El vehículo fue rápidamente retirado del lugar con la ayuda de una grúa y depositado en un corral de la ciudad para su resguardo.
La vía estuvo cerrada durante una hora y media, mientras se realizaban labores de levantamiento de los cuerpos de las víctimas.