Hoy en día, la popularidad de las manicuras en gel ha aumentado considerablemente desde hace años, y por una buena razón, porque les da un extra de confianza a las chicas que lo usan, además de lucir elegantes y hermosas.
Sin embargo, se han reportado casos en los que a mujeres que mantuvieron este tipo de manicura durante mucho tiempo les resultó difícil mover las manos con normalidad.
Estos son algunos efectos secundarios de las manicuras en gel.
Pérdida de flexibilidad y movilidad.
El uso constante de uñas de gel puede provocar una pérdida gradual de flexibilidad y movilidad en las manos.
La capa gruesa del gel puede restringir el movimiento natural de las uñas y ejercer presión sobre las articulaciones, lo que a largo plazo puede provocar rigidez y movimiento limitado. Además, el peso adicional de las uñas de gel puede ejercer presión sobre los músculos y tendones de las manos, causando dolor e incomodidad.
Puedes conocer el caso de Lisa Dewey, una mujer, que tras usar gel de manicura durante años apenas puede usar sus manos después de una reacción repentina a los productos para uñas.
Daños en uñas y cutículas.
El proceso de aplicar y quitar las uñas de gel puede perjudicar la salud de nuestras uñas y cutículas.
La eliminación inadecuada o el uso excesivo de productos químicos agresivos pueden debilitar las uñas, haciéndolas quebradizas y susceptibles de romperse.
Además, el uso frecuente de lámparas ultravioleta para secar el esmalte puede dañar la piel de las manos, aumentando el riesgo de envejecimiento prematuro y cáncer de piel.
Debemos mantener un equilibrio saludable.
Es importante que las uñas también reciban atención y cuidado de la salud, pues no solo pueden ayudarnos a detectar enfermedades y problemas físicos, sino que también deben recibir nutrientes y evitar el contacto con ciertas sustancias.
Períodos de descanso alternativos
Es importante permitir que las uñas respiren y crezcan más fuertes. Esto implica períodos alternos en los que no se usan las uñas de gel para permitir que las uñas naturales crezcan y se reparen.
Durante estos descansos, es recomendable utilizar tratamientos fortificantes que ayuden a mejorar la salud y el aspecto de las uñas.
Técnicas adecuadas de aplicación y eliminación.
Es fundamental que las uñas de gel sean instaladas y retiradas correctamente por profesionales capacitados. La aplicación incorrecta o la eliminación abrupta pueden dañar las uñas y las cutículas.
Se recomienda que busque salones de belleza de buena reputación que utilicen técnicas adecuadas para minimizar el daño y garantizar una experiencia segura.
Protección solar durante el secado con lámparas UV: Las lámparas de luz ultravioleta utilizadas para secar el esmalte en gel emiten rayos UVA que pueden dañar la piel de las manos.
Es importante aplicar protector solar en las manos antes de secarlas con lámparas UV para reducir el riesgo de daño y envejecimiento prematuro de la piel.