El Kalanchoe es un género de plantas crassulaceae de aproximadamente 125 especies. Está formada por una gran familia de plantas que se suelen utilizar como decoración del hogar o de la oficina ya que requiere pocos cuidados y es fácil que sobreviva en cualquier ambiente. Según los especialistas en plantas medicinales, tiene propiedades curativas, especialmente propiedades antiinflamatorias y antioxidantes.
Las más de cien especies son nativas de diferentes partes del mundo, como Europa, Asia y África. Sin embargo, en los últimos años las de Madagascar han llamado la atención de los científicos por sus propiedades y beneficios. Esta planta, por su morfología, es capaz de acumular agua en sus hojas, por lo que su riego es más esporádico. Además, su color y forma es muy similar al aloe.
Según Mario Aguilar, herbolario, su reproducción es por retoños. Es decir, está formado por hojas grandes y en el borde de estas tiene hojas pequeñas, que al caer echan raíces rápidamente. Por ello, también se caracteriza por ser muy invasivo. Es resistente al verano, ya que resiste sol, sombra, exterior o interior; también es fuerte contra plagas y enfermedades. Sin embargo, durante el invierno es importante protegerlo.
Tipos de plantas Kalanchoe
Existen una gran cantidad de plantas de Kalanchoe, sin embargo, existen tres de las más importantes en cuanto a su aporte medicinal. Además, han sido los más estudiados en los últimos años.
Kalanchoe pinnata: también conocida como «planta de Goethe», en honor al botánico alemán que la estudió. También se le llama «hoja de aire», «siempre viva» o «yerba de bruja».
Kalanchoe daigremontiana: Es una de las más conocidas ya que se relaciona con poder combatir el cáncer. Se le llama «aranto», «madre de miles» o «kalanchoe mexicano». Se caracteriza por tener manchas oscuras en las hojas.
Kalanchoe gastronis-bonnieri: tiene las hojas más grandes en comparación con las anteriores y se conoce popularmente como «Oreja de burro».
Propiedades
Estuardo Mendoza, naturista, indica que el Kalanchoe ha sido utilizado por la medicina tradicional para tratar infecciones, inflamaciones, quemaduras o enfermedades reumáticas. Es importante tener en cuenta la dosis, ya que si se consume en exceso podría presentar intoxicación.
Esta planta está compuesta por flavonoides y bufadienolides. Los primeros son pigmentos vegetales que están presentes en frutas y verduras, tienen propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, por lo que reducen el envejecimiento prematuro del organismo y reducen la inflamación que se produce tras una infección.
Su relación con el cáncer
La Kalanchoe daigremontiana ha sido famosa en los últimos años porque se le atribuye la cualidad de combatir el cáncer. Sin embargo, los expertos coinciden en que no existen estudios científicos que demuestren si esta hipótesis es cierta.
Armando Cáceres, biólogo químico, explica que al Kalanchoe se le atribuyó el poder curativo del cáncer hace aproximadamente 10 años. Sin embargo, queda muy poco tiempo para determinar si realmente tiene esa cualidad. Además, no hay ensayos clínicos que lo confirmen.
¿Su consumo presenta algún riesgo?
Cáceres también explica que algunas moléculas de bufadienolida presentan problemas de toxicidad, por lo que hay poca difusión del uso popular de la planta hacia el uso científico. Al parecer, algunas moléculas, cuando se consumen durante mucho tiempo, podrían tener efectos sobre el sistema cardiovascular.
Cuando se utiliza la planta por sus propiedades medicinales ya probadas científicamente, como su función antiinflamatoria, se podrían consumir aproximadamente 350 ml al día. Sin embargo, se recomienda que consulte a un naturópata oa un médico para la dosis adecuada, especialmente si toma medicamentos o sufre de otra enfermedad.