La dr. «La historia secreta de la guerra contra el cáncer» ha revelado los peligros de la radiación emitida por los teléfonos móviles durante mucho tiempo, devora Davis, autor del libro «La historia secreta de la guerra contra el cáncer».
Como muchas personas, la Dra. Davis simplemente no creía en la posibilidad de que los teléfonos celulares fueran peligrosos, hasta que decidió investigar el caso.
Y ahora, con la evidencia científica que tienen, está tratando de que la gente entienda que los teléfonos celulares no solo son peligrosos, sino que también pueden ser mortales.
El doctor. Davis está convencido de que el teléfono celular es extremadamente dañino, ya que interfiere con el ADN.
Un caso interesante que puede servir como ejemplo del potencial destructivo de los teléfonos celulares es el de una mujer joven que no tenía factores predisponentes para el cáncer. Se cuidaba, hacía ejercicio, tenía una vida tranquila. Pero aún así un cáncer de mama la atrapó.
El caso está documentado en la revista estadounidense Environmental Health Trust. Los médicos descubrieron entonces que la joven tenía la «curiosa» costumbre de colocar el dispositivo celular junto a sus senos, en su sostén.
Lo interesante es que el cáncer se desarrolló exactamente en el lugar donde la mujer solía usar el teléfono. Dos expertos en cáncer, los doctores Robert Nagourney y John West, concluyeron que la tesis de que el celular fue el causante del cáncer en esa mujer es muy fuerte.
Aún sin poder garantizarlo al 100%, entienden que el estuche debe servir de alerta no solo para las mujeres que se ponen el teléfono en el sostén, sino también para todas las personas que se ponen el dispositivo en otros lugares, como los bolsillos del pantalón o de la camisa. .
Quizás no haya evidencia «concreta» de que los teléfonos celulares causen cáncer. Pero hay muchos estudios que relacionan el teléfono celular con problemas de salud graves. Por ejemplo, según investigadores de la Universidad de Exeter en el Reino Unido, dejar el teléfono celular en el bolsillo del pantalón puede contribuir a la infertilidad masculina.
Para llegar a esta conclusión, los científicos analizaron diez investigaciones, que incluyeron 1.492 muestras de expectativas proporcionadas por clínicas de fertilidad y centros de investigación.
Las muestras que habían estado expuestas a la radiación de los teléfonos celulares tuvieron una reducción del 8 % en la motilidad de los espermatozoides y una reducción del 9 % en la viabilidad de los espermatozoides.
Es decir, hubo una reducción en la actividad y el porcentaje de espermatozoides vivos. Además de exponer el esperma a la radiación, los teléfonos celulares en el bolsillo también pueden elevar la temperatura de la región testicular, lo que podría comprometer la calidad del esperma.
Otro estudio, realizado en Suecia, demostró que el uso prolongado de este tipo de dispositivos aumenta en un 240% el riesgo de desarrollar tumores cerebrales.
REPRODUCCIÓN DE LA PORTADA DEL LIBRO DE LA DRA. DEVRA DAVIS
El estudio analizó a 2200 pacientes con cáncer y 2200 usuarios sanos, en busca de alguna conexión entre el uso de dispositivos móviles y el desarrollo de tumores cerebrales.
Según Kjell Mild, líder del estudio, el uso de teléfonos celulares aumentó el riesgo de cáncer en el lado de la cabeza donde más se usa el teléfono en un 240%.
Lo cierto es que el estudio habla de un uso prolongado, aun así es preocupante, ya que muchas personas pasan horas frente a sus celulares y algunos incluso duermen con el dispositivo al lado de la cabeza.
Hay muchos otros estudios que relacionan el celular con enfermedades, podríamos escribir páginas y más páginas sobre ellos.
Sin embargo, lo más importante es guiarte para minimizar los riesgos de esta tecnología en tu vida.
Por supuesto, en un mundo donde la cantidad de dispositivos móviles está a punto de superar la de personas, es imposible mantenerse libre de la contaminación electromagnética causada por esos dispositivos.
Pero existen medidas que atenúan la acción negativa de las ondas electromagnéticas del celular.
– Utilice auriculares o altavoz.
– No deje el teléfono conectado cerca de su cuerpo.
– No hable en lugares concurridos y donde la señal sea débil, como automóviles y ascensores.
– Cuidado con los gadgets que prometen proteger contra la radiación, ya que la mayoría empeoran la radiación y obligan al celular a transmitir con más potencia.
– Guíe a sus hijos para que envíen más mensajes (SMS o WhatsApp) en lugar de hacer llamadas.
– Las mujeres embarazadas deben mantener el teléfono alejado de la barriga.
– Los hombres deben evitar llevarlo en el bolsillo, ya que la radiación del dispositivo puede afectar la fertilidad.
– Las mujeres deben evitar colocar el dispositivo en el sostén, junto a los senos, ya que hemos visto que esto aumenta el riesgo de cáncer de mama.
– Si tienes que dejarlo en el bolsillo (si es la única forma), gira el lado del teclado hacia tu cuerpo, ya que las antenas, donde hay más radiación, se quedan atrás.
– Nunca duerma con el dispositivo junto a su cuerpo; Lo ideal es apagarlo y ponerlo en otra habitación.