Soñar es uno de los fenómenos biológicos más antiguos; como el ser humano duerme, sueña. Pero a lo largo de la mayor parte de nuestra historia, los sueños han permanecido como un misterio, dejando a científicos, filósofos y artistas buscando su significado.
Aunque todo el mundo sueña, el contenido de esos sueños y su efecto sobre el sueño pueden variar drásticamente de una persona a otra.
Aunque no existe una explicación simple del significado y el propósito de los sueños, es útil comprender los conceptos básicos de los sueños, el impacto potencial de las pesadillas y los pasos que puede seguir para dormir mejor con dulces sueños.
¿Qué es un sueño?
Los sueños son imágenes, pensamientos o sentimientos que ocurren durante el sueño. Las imágenes visuales son las más comunes, pero en los sueños todos los sentidos pueden estar involucrados.
Algunas personas sueñan en color, otras en blanco y negro, y las personas ciegas suelen tener más componentes del sueño relacionados con el sonido, el gusto y el olfato.
Los sueños pueden variar desde extraordinariamente intensos o emotivos hasta muy vagos, fugaces, confusos o incluso aburridos.
Algunos sueños son felices, mientras que otros dan miedo o son tristes. A veces los sueños parecen tener una narrativa clara, mientras que muchas otras parecen no tener ningún sentido.
– Los estudios han revelado varios tipos de contenido de los sueños, pero algunas características típicas de los sueños incluyen:
– Tiene una perspectiva en primera persona, no es intencional, el contenido puede ser ilógico o incluso incoherente.
– El contenido del sueño incluye a otras personas que interactúan con el soñante y entre sí, provoca emociones fuertes.
Aunque estas características no son universales, se encuentran al menos hasta cierto punto en la mayoría de los sueños normales.
Hay muchas incógnitas sobre los sueños y el sueño, pero lo que los científicos saben es que casi todo el mundo sueña cada vez que duerme.
¿Por qué soñamos?
Los expertos en sueño siguen debatiendo por qué soñamos. Las diferentes teorías sobre el propósito de soñar incluyen:
- Consolidar la memoria: Soñar se ha asociado con la consolidación de la memoria, lo que sugiere que el sueño puede cumplir una función cognitiva importante para reforzar la memoria y el recuerdo informativo.
- Procesamiento de emociones: la capacidad de experimentar y ensayar sentimientos en diferentes contextos imaginarios puede ser parte del método del cerebro para manejar las emociones.
- Limpieza mental: Los periodos de ensueño pueden ser la forma en que el cerebro «ordena», eliminando información parcial, errónea o innecesaria.
- Reproducción instantánea: el contenido de los sueños puede ser una forma distorsionada de reproducción instantánea en la que se revisan y analizan eventos recientes.
- Actividad cerebral accidental: este punto de vista sostiene que soñar es solo un subproducto del sueño que no tiene un propósito o significado esencial.
Los expertos en neurociencia y psicología continúan realizando experimentos para descubrir qué sucede en el cerebro durante el sueño, pero incluso con la investigación en curso, puede ser imposible probar de manera concluyente cualquier teoría sobre por qué soñamos.
¿Cuándo soñamos?
La mayoría de la gente sueña con dos horas por noche. Puede soñar durante cualquier fase del sueño, pero los sueños son más prolíficos e intensos durante la fase de movimiento ocular rápido (REM).
Durante el sueño REM, la actividad cerebral aumenta significativamente en comparación con el sueño no REM, lo que ayuda a explicar los diferentes tipos de sueños que ocurren durante el sueño REM.
Los sueños durante el sueño REM suelen ser más vívidos, fantásticos o extraños, aunque pueden incluir elementos de la vida de vigilia.
Por el contrario, los sueños no REM suelen tener un contenido más coherente, con pensamientos o recuerdos relacionados con un tiempo y lugar concretos.
El sueño REM no se distribuye uniformemente a lo largo de la noche. La mayor parte del sueño REM ocurre durante la segunda mitad de un período de sueño normal, lo que significa que los sueños tienden a concentrarse en las horas previas a despertar.
Quedarse dormido
El cerebro humano es un lugar fascinante. Está formado por aproximadamente 80 mil millones de neuronas y genera oscilaciones eléctricas conocidas como ondas cerebrales.
Hay cinco tipos de ondas cerebrales: alfa, beta, theta, delta y gamma, cada una de las cuales indica un estado diferente entre el sueño y la vigilia.
Usando el EEG, una prueba que registra la actividad eléctrica del cerebro, los científicos han identificado que cuando estamos despiertos, nuestro cerebro emite ondas beta y gamma.
Estos suelen tener un efecto estimulante y nos ayudan a mantenernos activos en las actividades mentales.
Pero durante la transición al sueño, la cantidad de ondas beta disminuye significativamente y el cerebro produce altos niveles de ondas alfa. Estas ondas regulan la atención y ayudan a filtrar las distracciones.
Las ondas alfa también se producen cuando soñamos despiertos, meditamos o escuchamos el sonido de la lluvia. Mientras nuestra mente divaga, se activan muchas partes del cerebro, incluido un sistema especializado llamado «red de modos por defecto».
Las alteraciones de esta red, se han relacionado con diversos trastornos cerebrales, como la esquizofrenia, la depresión y el TDAH.
Algunos trastornos cerebrales, como la enfermedad de Parkinson, se han asociado con sueños vívidos y desagradables y patrones de ondas cerebrales erráticos.
Por último, a medida que entramos en un estado de ensoñación, la corteza prefrontal del cerebro, responsable de mantener los impulsos bajo control, se vuelve lentamente menos activa.
Es entonces cuando se produce un repunte de las ondas theta que conduce a una ventana de conciencia sin restricciones; hay poca censura por parte de la mente, lo que permite sueños viscerales y pensamientos creativos.
En resumen, aunque hay mucho que aprender sobre los sueños y su función exacta, se cree que tienen un papel importante en la salud y el bienestar del cerebro y del cuerpo.
Si le preocupan sus sueños y/o tiene pesadillas frecuentes, considere hablar con su médico o consultar a un especialista del sueño.